Pero ¿que nos pasa?
Viajamos en nuestros cuerpos como carcasas, y aqui importa el que carcasa más llamativa lleva.
Andamos fríos por ciudades de ritmo vertiginoso, no nos rozamos, no hay contacto, no hay cercanía.
A veces se cruzan nuestros caminos y por un momento experimentamos esa colisión, como explicaba la pelicula "Crash"; una sobredosis de realidad.
Todo es frío, todo es fingido.
Tenemos redes sociales,medios de comunicación instantanea; para hacernos sentir falso calor; pero no es más que eso, otro intento de engañarnos a nosotros mismos para que nos sea más facil llevar este frío social.
Que no esta bien visto mostrarse sin máscaras, que tenemos que estudiarnos un personaje antes de salir de casa; es nuestra forma de evitarnos daños.
No hacemos lo que realemnte queremos, hacemos lo que menos riesgo conlleve; la acción por la que menos nos arriesgamos a ser dañados.
Cuando nos mostramos sin carcasas, sin excentricidades nos exponemos a que nos hieran; es una forma de confiar que nos puede salir cara.
Nos escondemos en nuestro caparazón,nos mostramos seguros firmes y orgullosos; en muchos casos para esconder inseguridad o defensa ante los golpes.
Como comentaba hace un tiempo con un amigo: "No es interesante conocer y saber todo de alguien en 5 minutos".
Pero tampoco dejemos que el frio y las máscaras nos deshumanicen.
Yo ya estoy cansada; no soy capaz de participar en esta locura más tiempo, el frío nos va a llevar a perder la sensibilidad, a perdernos miles de cosas que solo se consiguen arriesgando.
En la sociedad en la que vivimos tal vez parezca un acto suicida bajarse del tren de las máscaras; es correr un gran riesgo.
He llegado a la conclusión de que no quiero vivir así, siendo complice de este circo que nos hemos montado de relaciones sociales falsas y mediocres, por miedo a el que pensará el resto o al que te dañen.
Mejor vivir corriendo riesgos que seguir sintiendo ese frío que nos terminará convirtiendo en figuras de hielo.
Ya me dado varias ostias, pero si hay algo en lo que creo y en lo que me mantedré siempre firme es que en esta vida nadie regala nada.